Antiguo Testamento
El Antiguo Testamento es la primera parte de la Biblia cristiana que precede y anuncia al Nuevo Testamento. En esta sección de las Escrituras se cuenta la historia de la creación del mundo y de la humanidad, y se incluyen narraciones sobre los primeros fundamentos de la fe cristiana, así como diversos personajes representativos de las principales religiones monoteístas, por ejemplo, Moisés, Noé y Abraham. ¿Alguna vez te has preguntado cuál es la diferencia entre el Antiguo y el Nuevo Testamento?, o ¿cuáles son los libros que lo componen? Te invitamos a descubrir a continuación la riqueza de estos textos bíblicos que revelan la Palabra de Dios.
¿Qué es el Antiguo Testamento?
Para los cristianos, el Antiguo Testamento, también conocido como Primer Testamento, representa la antigua alianza entre Dios y la humanidad. La Biblia también menciona la nueva alianza o pacto que tuvo su origen con el nacimiento de Cristo.
Cuando analizamos las Sagradas Escrituras, podemos ver que el Antiguo Testamento nos habla de un Dios creador y liberador, mientras que el Nuevo Testamento habla de un Dios Padre que nos dio la salvación a través de su hijo.
Por otro lado, tengamos en cuenta que, tanto el Nuevo como el Antiguo Testamento revelan la Palabra de Dios, y los creyentes sabemos que han sido escritos bajo la inspiración del Espíritu Santo, pero si miramos su contenido, podemos ver que los textos más antiguos del Antiguo Testamento quizá son más difíciles de entender e interpretar que los Evangelios o las Epístolas del Nuevo Testamento, pues adoptan diferentes formas literarias y se arraigan en diferentes contextos culturales. Sin embargo, las diversas narraciones míticas, poéticas, proféticas e históricas del Antiguo Testamento nos permiten descubrir el nacimiento del pueblo de Dios, su trayectoria y su relación con el Señor, que a veces era un poco caótica.
Los diferentes libros del Antiguo Testamento
Los libros del Antiguo Testamento fueron escritos en diferentes momentos de la antigüedad, principalmente en hebreo, aunque algunos textos también fueron escritos en griego o arameo.
La distribución y el orden de los libros del Antiguo Testamento ha sido definida por diferentes cánones, incluyendo el canon de la Septuaginta y el canon de la Biblia hebrea.
Te presentamos algunos de ellos a continuación:
- Los cinco libros del Pentateuco (también conocidos como los cinco libros de Moisés), que comprenden los libros de Génesis, Éxodo, Levítico, Números y Deuteronomio.
- Los llamados libros "históricos"; entre los cuales podemos encontrar el libro de Rut, el libro de Ester, los libros de Samuel, etc...
- Los libros de la "Sabiduría", que incluyen el libro de los Salmos, los Proverbios, el libro de Job, el Cantar de los Cantares y el Eclesiastés.
- Los libros de los profetas (Ezequiel, Elías, Isaías, Zacarías, Daniel, Jeremías, Jonás, Josué...)
Personajes bíblicos del Antiguo Testamento
Muchos de los personajes bíblicos que conocemos están profundamente arraigados en nuestras culturas y constituyen la base de nuestras religiones. Por ejemplo:
- Adán y Eva, en el relato de la Creación nos recuerdan que Dios creó al hombre porque así lo deseó en su corazón.
- Moisés, el hombre que Dios utilizó para sacar al pueblo judío de Egipto, nos dio a conocer los Diez Mandamientos, y su hermano Aarón fue su vocero ante Faraón.
- Abraham, mediante su fe fue llamado "padre de naciones", y de él descendieron su hijo Isaac y su nieto Jacob,
- También podemos encontrar al rey David, de cuyo linaje desciende el Mesías.
Por medio de los diferentes relatos bíblicos de estos personajes podemos descubrir no solo su aspecto heroico, sino también sus debilidades, miedos y temores, los cuales nos permiten comprender lo que estos sentimientos negativos acarrean. Por ejemplo, podemos ver las consecuencias de la envidia y los celos en la historia de Caín y Abel o de José, que fue vendido por sus hermanos, así como el resultado del orgullo en el episodio de la Torre de Babel.
Pero el Antiguo Testamento también revela a un Dios que ayuda a los que le oran y obedecen su ley, a pesar de las adversidades, tal es el caso de Daniel en el foso de los leones, David en su lucha contra Goliat, Noé al construir el arca, o el pueblo de Israel en el relato de las trompetas de Jericó. Todos estos episodios nos muestran a un Dios que inspira sabiduría y fuerza a los que le temen y le invocan: un claro ejemplo de esto lo vivió el rey Salomón en el momento de su famoso juicio.
El Antiguo Testamento también relata la historia de muchas mujeres que inspiraron, influyeron y marcaron la historia del pueblo de Dios. Tal es el caso de Rebeca, las esposas de Jacob (Raquel y Lía) Sípora, Débora y Rahab
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