Maná

Tanto el segundo como el cuarto libro del Pentateuco, es decir, los libros de ÉxodoNúmeros, se centran en la historia de la liberación del pueblo de Israel de las manos de los egipcios. En estos pasajes bíblicos encontramos detalles sobre las batallas que el pueblo libró, las dificultades que tuvieron en cuanto a su relación con Dios, y la ayuda divina recibida durante su larga travesía por el desierto. De hecho, la Biblia nos dice que el maná del cielo fue el principal alimento que tuvieron los israelitas mientras estuvieron en el desierto. Te invitamos a descubrir los versículos bíblicos en los cuales se menciona el maná, no solo en el Antiguo Testamento, sino también en el Nuevo Testamento.

¿Qué es el maná?

Después de salir de Egipto, el Señor condujo a Moisés y al pueblo de Israel por el desierto, sin embargo, empezaron a quejarse y a decir que tenían hambre. “Entonces el Señor dijo a Moisés: «Yo haré caer pan para ustedes desde lo alto del cielo, y el pueblo saldrá cada día a recoger su ración diaria. Así los pondré a prueba, para ver si caminan o no de acuerdo con mi ley”. (Éxodo 16:4). Esta provisión sobrenatural fue el principal alimento del pueblo durante su paso por el desierto. “La casa de Israel llamó «maná» a ese alimento. Era blanco como la semilla de cilantro y tenía un gusto semejante al de las tortas amasadas con miel”. (Éxodo 16:31)

El maná en el Antiguo Testamento

El maná en el desierto

“¡Ahora nuestras gargantas están resecas! ¡Estamos privados de todo, y nuestros ojos no ven nada más que el maná!». El maná se parecía a la semilla de cilantro y su color era semejante al del bedelio. El pueblo tenía que ir a buscarlo; una vez recogido, lo trituraban con piedras de moler o lo machacaban en un mortero, lo cocían en una olla, y lo preparaban en forma de galletas. Su sabor era como el de un pastel apetitoso”. (Números 11:6-8)

No sólo de pan vive el hombre

“Te afligió y te hizo sentir hambre, pero te dio a comer el maná, ese alimento que ni tú ni tus padres conocían, para enseñarte que el hombre no vive solamente de pan, sino de todo lo que sale de la boca del Señor”. (Deuteronomio 8:3).

El maná cesó al entrar en tierra de Canaán

“El maná dejó de caer al día siguiente, cuando comieron los productos del país. Ya no hubo más maná para los israelitas, y aquel año comieron los frutos de la tierra de Canaán”. (Josué 5:12)

El maná del cielo 

“Entonces mandó a las nubes en lo alto y abrió las compuertas del cielo: hizo llover sobre ellos el maná, les dio como alimento un trigo celestial; todos comieron en pan de ángeles, les dio comida hasta saciarlos”. (Salmos 77:23-25)

El maná en el Nuevo Testamento

El pan de la vida

“Yo soy el pan de Vida. Sus padres, en el desierto, comieron el maná y murieron. Pero este es el pan que desciende del cielo, para que aquel que lo coma no muera. Yo soy el pan vivo bajado del cielo. El que coma de este pan vivirá eternamente, y el pan que yo daré es mi carne para la Vida del mundo”. (Juan 6:48-51)

El maná escondido

“El que pueda entender, que entienda lo que el Espíritu dice a las Iglesias: al vencedor, le daré de comer el maná escondido, y también le daré una piedra blanca, en la que está escrito un nombre nuevo que nadie conoce fuera de aquel que lo recibe”. (Apocalipsis 2:17)

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